Saint Seiya Roleplay
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Últimos temas
» It´s showtime
Perilous, those who are in the Blue EmptySáb Ene 11, 2020 3:36 pm por Riku Akatsuki

» Libro de Firmas
Perilous, those who are in the Blue EmptySáb Ene 11, 2020 3:33 pm por Riku Akatsuki

» Horror Castle - Evento Halloween
Perilous, those who are in the Blue EmptyLun Nov 18, 2019 2:08 pm por Matt

» Nuestros Datos
Perilous, those who are in the Blue EmptyLun Oct 21, 2019 11:07 pm por Kaito

» Inscripciones Evento de Halloween 2019
Perilous, those who are in the Blue EmptySáb Oct 05, 2019 6:03 pm por Kaito

» Capítulo 1: Amor y Guerra [Ambientación]
Perilous, those who are in the Blue EmptyJue Sep 26, 2019 9:25 pm por Kaito

» Sistema de Niveles y Puntos
Perilous, those who are in the Blue EmptyLun Sep 16, 2019 12:28 am por Kaito

» Guía de Territorios y Lugares
Perilous, those who are in the Blue EmptyLun Sep 16, 2019 12:24 am por Kaito

» Petición de Personaje
Perilous, those who are in the Blue EmptyLun Sep 09, 2019 10:49 pm por Kaito


Perilous, those who are in the Blue

Ir abajo

Perilous, those who are in the Blue Empty Perilous, those who are in the Blue

Mensaje por Invitado Sáb Ene 28, 2017 5:31 pm

La reunión había terminado de la misma manera que inició - rápida, efímera, sin mucho sentido. La mujer azul ignoró a los dos Generales y esperó en el extremo del claustro, Nathaniel reuniéndose con él poco después. Ambos caminaron por el pasillo iluminado tenuemente por un sol débil, rodeado por nubes de color plomizo.

Aquel parecía un recuerdo de una era distante, como si los siglos no hubieran pasado entre sus dos vidas anteriores. Hablaron de como habían revivido en la era, Nate con su lado y ella con el propio - ambos tan inverosímiles como reales. Cuando ascendieron por unas escaleras hasta los jardines del patio superior, la nieve comenzó a caer. Ligera, danzarina. Los copos se unieron a las flores, convirtiéndose en gotas frías de rocío.

Fue cuando la chica sintió sus piernas ceder, aferrándose de suerte en el brazo derecho de Tritón.

-Lo siento Nathaniel, todavía...todavía no tengo mucha fuerza. Lidiar con tozudos no ayuda.- dijo ella, siguiendo la caminata por el pasillo central del patio, cercado por dos enormes piscinas de agua sobre la que se elevaban zarzas y arbustos de flores únicas, incluso algunas de hielo exótico que por leyes naturales, no debían de poder mantenerse siquiera. -Y ya conoces el arte de la reina. Es una carga pesada de llevar. A decir verdad, es reconfortante no tener eso sobre mis hombros esta era.- añadió cojeando, todavía apoyada en Nate. Al minuto arribaron al centro, donde una fuente con estatuas marinas y relieves los recibió, el agua burbujeando al golpear la piscina debajo. Con algo de dificultad, la mujer azul se sentó en uno de los bancos de roca blanca con detalles en azul verdoso. -Y, ya me contaste como renaciste en esta era. ¿Cómo fue que ascendiste al guardián de los Aquadrops?- preguntó, su rostro mostrando genuina curiosidad desde su llegada a Talasa.
avatar
Invitado
Invitado


Volver arriba Ir abajo

Perilous, those who are in the Blue Empty Re: Perilous, those who are in the Blue

Mensaje por Nate Vie Mar 31, 2017 1:24 am

La reunión de los Mariners había terminado, siendo una total perdida de tiempo. Le resultaba increíble saber que, dentro de las fuerzas de Poseidón aún quedaban esos rasquicios de rebeldía. Los peces agitadores no comprendían que esa guerra ya había terminado, que su señor estaba cómodamente instalado en Talasa y que ellos tenían una nueva e importante misión, o al menos él sí tenía cosas por hacer con esa vida. El único punto positivo de ese encuentro inesperado fue ver a Lapis de nuevo. Ella tenía el mismo aspecto que la última vez que se cruzaron, por lo que casi podía jurar que había regresado en el tiempo. Claro que no era más que una ilusión. Lejos quedaron los ecos de revolución y planes de villano cliché, abriendo paso a un paseo por el camino de los recuerdos entre los dos generales.

Nathan se detuvo a admirar una flor de hielo, con una expresión que era incomprensible: su rostro estaba tan serio como siempre, pero había un brillo de curiosidad en sus ojos, como si se preguntara cómo era que aquellas plantas maravillosas pudieran existir.-Quise redimirme. Cuando me conociste me uní a Poseidón debido a que tenía motivos escondidos, me movía por interés personal y las cosas no terminaron bien- dijo, sosteniendo a Lapis por los hombros y ofreciéndole su brazo para que lo usara como soporte al notar lo débil que se encontraba. No solamente tenía la presencia de un fantasma, parecía que ella iba a desvanecerse en cualquier momento.

-Él vio que estaba arrepentido y me dio una oportunidad de retribuir convirtiéndome en guardián de Talasa. Tengo un deber protegiendo a las personas que viven en esta isla y también a nuestro señor. Es suficiente para mí- gracias a la compasión de Poseidón, Nate era capaz de seguir adelante. No culpaba a nadie por sus malas decisiones, tampoco lamentaba los sucedido, sin embargo tenía ese sentimiento de querer devolver el favor al señor de los mares, sin importar que eso le tomara una eternidad.

Rodeó a Lapis con su brazo.-No te mentiré. A veces los viejos hábitos que heredé de mi padre continúan presentes- Seguramente Lapis recordaría esos hábitos. Lymnades solía tomarlo por un chico tonto debido a que Nate ni siquiera sabía sostener una espada correctamente y así quería enfrentar a todas las abominaciones y monstruos que se cruzaban en su camino para diseccionarlos e investigarlos a fondo.

-He mejorado mis habilidades con la espada. Quisiera volver a encontrarme con el Lymnades del que heredaste tu escama para enseñárselo, pero lamentablemente ya no tengo mi espada conmigo- No parecía lamentarlo en realidad por el modo en el que lo había dicho, pero lo cierto era que ese viejo fragmento de cadaver de demonio era la única pertenencia que le había dado su padre antes de abandonarlo y guardaba un significado especial que no podía explicar. Tal vez le daba la ilusión de que alguna vez su padre se preocupó por él y quiso darle un modo de defenderse contra todo el mal que se avecinaba. Él se sostenía a esa teoría para no antagonizar a su progenitor.
Nate
Nate
Gold Saint
Gold Saint

Armadura :
Santo Dorado de Capricornio
Perilous, those who are in the Blue RugF7lY

Mensajes : 55

Volver arriba Ir abajo

Perilous, those who are in the Blue Empty Re: Perilous, those who are in the Blue

Mensaje por Invitado Jue Mayo 25, 2017 8:36 pm

Retribución. Entendía de eso - era parte de su razón en la era donde vivió para ser la guardiana del jardín imperial en Welheim. En cualquier caso, tuvo destellos del pasado, una sensación cálida que la hizo sonreír con honestidad ante las palabras de Nathaniel.

Entonces hizo referencia a sus viejos hábitos, por lo cual se le escapó una risita.

"Te entiendo. A veces hay hábitos que no mueren." dijo la Mujer Azul recuperando algo de fuerzas, levantándose para encarar la fuente congelada. "Quizá por eso es que el Emperador te dio la oportunidad. Quizá por eso también pactaron un armisticio con el Santuario...muy a pesar de los idiotas subversivos que hemos visto. Una parte de mi se pregunta que tan mal terminarán...luego recuerdo que hay cosas más importantes que hacer ¿cierto?"

Y como no. Muy seguramente, aquellos tontos terminarían encarcelados, muertos o algo peor. Siempre había algo peor que la muerta al tratarse de los dioses.

Escuchó atentamente a Nathaniel.

"Quisiera ayudar con eso. No creo que el guardián del Antártico actual tenga una espada demoníaca... No, si la hay, pero es propiedad de la emperatriz. Brongaavard, el fragmento de Caladbolg." comentó ella extendiendo la palma y cerrando los ojos. Sobre sus dedos flameaba su cosmos creando ondas de agua. Estaba revisando la información contenida en la bóveda del mar donde se guardaban las armas del dragón del abismo, la bruja del mar, la reina de Poseidón. "No. Vortigern no está en la bóveda... Pero hay algo que puedo usar para ubicarla." comentó. En su mano se materializó un compás de la época de expansión marítima.

Con un ademán Lapis lo abrió.

"No es mucho...pero puedo buscar un rastro. Y tú serás el punto de partida."
avatar
Invitado
Invitado


Volver arriba Ir abajo

Perilous, those who are in the Blue Empty Re: Perilous, those who are in the Blue

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.