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Horror Castle - Evento Halloween
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Horror Castle - Evento Halloween
Recuerdo del primer mensaje :
Trama
Un sobre misterioso ha llegado a tus manos. No puedes recordar cómo lo obtuviste ni tampoco cómo es que has llegado a un pueblo desconocido que parece pertenecer a otra época. Las puertas de todas las casas se encuentran cerradas y no parece haber personas que puedan ayudarte en los alrededores. El sonido de la música y las luces brillantes te atrapan, mostrándote el camino serpenteante que conduce a un castillo en la cima de un risco. No quieres visitar un lugar tan aterrador y lúgubre, pero las luces y el ruido de la celebración te dicen que ahí podrías conseguir ayuda o asilo para pasar la fría noche.
Papeles
Yamato:
Anheru:
Ash Lynx
Eiji
Nota: Recuerden que es halloween y deberán especificar el disfraz que usan. Diviértanse
-Cualquier otra persona puede participar, pero no se le dará un papel como a los demás y tendrán que imaginar la historia de su personaje para esto.
EVENTO HALLOWEEN
SAINT SEIYA ROLEPLAY
Trama
Un sobre misterioso ha llegado a tus manos. No puedes recordar cómo lo obtuviste ni tampoco cómo es que has llegado a un pueblo desconocido que parece pertenecer a otra época. Las puertas de todas las casas se encuentran cerradas y no parece haber personas que puedan ayudarte en los alrededores. El sonido de la música y las luces brillantes te atrapan, mostrándote el camino serpenteante que conduce a un castillo en la cima de un risco. No quieres visitar un lugar tan aterrador y lúgubre, pero las luces y el ruido de la celebración te dicen que ahí podrías conseguir ayuda o asilo para pasar la fría noche.
Papeles
Yamato:
- Papel:
- El hijo de un magnate inmobiliario. Al principio no tienes idea de cómo apareciste en ese lugar y adjudicas tu falta de memoria a tus píldoras para controlar tu ansiedad. Ves el sobre en tus manos y el enorme castillo frente a ti, y te convences a ti mismo de que estás ahí para comprar ese castillo con la intención de convertirlo en un hotel. Decides subir para pedir información, tratando de no pensar en la razón por la que tomas pastillas para controlar tu ansiedad: tu novio, al que tu padre no aprueba porque cree que solamente busca tu fortuna y que te engaña constantemente con mujeres para pretender que no es gay.
Anheru:
- Papel:
- Estudiante universitario de la carrera de psicología. Es halloween, bebiste mucho en una fiesta y despertaste en medio de una aldea. Te das golpes de cabeza preguntándote porque has bebido tanto, pero entonces revisas los mensajes de tu teléfono celular: son mensajes de Cossete, esa chica con la que rechazaste pasar la noche para ir a beber con tus amigos y disfrutar de tu juventud. En retrospectiva te sientes como un tonto, ya que ella te ha gustado desde la secundaria, pero sabes que no eres lo suficientemente bueno para ella debido a tu mala relación con el alcohol, las fiestas y los excesos, por lo que prefieres alejarla y mantenerla como una amistad, aunque ella quiere más. Te dices a ti mismo que vas a ser un hombre diferente después de esa noche, pero antes de pensar en redención, debes encontrar una forma de volver a casa. Quizás en el castillo podrás encontrar ayuda, quizás.
Ash Lynx
- Papel:
- Modelo y actor. Eres un chico al que sus padres han presionado constantemente para obtener fama y ser la fuente de ingresos de la familia. Estás harto de esta vida y te gustaría dejarla, pero no odias del todo a tus padres y te mantienes en tus asuntos tratando de apartar tu vida laboral de la vida personal y así hacer un poco más llevadera tu existencia sin recaer en drogas como hacen la mayoría de tus colegas en el medio. Iniciaste una relación romántica con tu fotógrafo favorito dos años atrás, y te gustaría que fuera algo más que tu novio. Apareces junto a Eiji en la aldea sin saber nada, pero crees que todo eso es un plan de Eiji para que te tomes unas vacaciones del trabajo como siempre te sugiere.
Eiji
- Papel:
- fotógrafo profesional. Tu ambición era una carrera en el mundo del deporte, pero tus sueños se vieron frustrados después de que sufriste una lesión. Aunque tu cuerpo sanó, perdiste la confianza en ti mismo y decidiste rehacer tu vida, encontrando en la fotografía la medicina perfecta para volver a sentirte seguro de ti mismo. Ash Lynx, un modelo y actor primerizo se convirtió en tu musa y el amor de tu vida, pero no te atreves a decírselo ya que temes asustarlo con la idea del compromiso. Al aparecer en ese extraño lugar todo te parece muy extraño, pero al encontrarte junto a Ash piensas que solamente se trata de una broma de Halloween.
Nota: Recuerden que es halloween y deberán especificar el disfraz que usan. Diviértanse
-Cualquier otra persona puede participar, pero no se le dará un papel como a los demás y tendrán que imaginar la historia de su personaje para esto.
Re: Horror Castle - Evento Halloween
—Me parece un buen plan —respondió Eiji, tomando a Ash de la mano con una sonrisa inocente en sus labios, observando a su novio con unos ojos que desbordaban amor.—Espero que esta noche me compenses todas las citas que tuvimos que cancelar debido a tus obligaciones en el set de filmación. No importa en dónde estemos, mientras esté contigo me siento feliz —dijo el joven de cabello oscuro, besando a Ash en los labios.
Se sorprendió con el realismo de los disfraces. Demonios, monstruos, esqueletos, hombres lobo, momias, todos parecían ser muy reales.—Vaya, se han esmerado en sus disfraces. Creo que esta noche no voy a ganar ningún premio al mejor disfraz si compito con todos estos sujetos —dijo Okumura, quien no sabía hacía dónde mirar debido a lo impresionantes que eran todos los personajes de terror reunidos bajo el mismo techo. Eiji sintió un escalofrío cuando una persona disfrazada de espantapajaros rozó su hombro.—Eso fue muy extraño —comentó el japonés, lo suficientemente alto para que Ash lo escuchara. Debido a esa distracción, en ningún momento advirtió la presencia de alguien acercándose por la espalda.
El filo de una hoz apareció muy cerca de su cuello, sintiéndose amenazado por un momento hasta que vio el rostro del responsable bajo la capa negra que lo envolvía.—Ten cuidado con esa cosa, casi me matas de un susto... No sabemos cómo fuimos a parar aquí —respondió Eiji con honestidad a la pregunta de Basile.
Eiji se quedó perplejo al escuchar a Basile diciéndole cosas tan terribles a Ash. Sabía que ambos no se agradaban, pero ese odio era algo nuevo. ¿Qué le había hecho su novio para que este hiciera comentarios malintencionados? Aquello hizo enojar a Eiji, quien no dudó en responder al ataque, colocándose entre ambos.
—¿Por qué dices esas cosas tan malas sobre Ash? Tú no lo conoces. Deberías hablar con las personas antes de creer en rumores absurdos sobre ellas... —dijo Eiji, tratando de mantener la compostura. No soportaba cuando alguien emitía un juicio sobre Ash sin conocerlo, debido a que sabía que las personas siempre se tomaban esa libertad cuando se trataba de temas que involucraban a su novio.
Se sorprendió con el realismo de los disfraces. Demonios, monstruos, esqueletos, hombres lobo, momias, todos parecían ser muy reales.—Vaya, se han esmerado en sus disfraces. Creo que esta noche no voy a ganar ningún premio al mejor disfraz si compito con todos estos sujetos —dijo Okumura, quien no sabía hacía dónde mirar debido a lo impresionantes que eran todos los personajes de terror reunidos bajo el mismo techo. Eiji sintió un escalofrío cuando una persona disfrazada de espantapajaros rozó su hombro.—Eso fue muy extraño —comentó el japonés, lo suficientemente alto para que Ash lo escuchara. Debido a esa distracción, en ningún momento advirtió la presencia de alguien acercándose por la espalda.
El filo de una hoz apareció muy cerca de su cuello, sintiéndose amenazado por un momento hasta que vio el rostro del responsable bajo la capa negra que lo envolvía.—Ten cuidado con esa cosa, casi me matas de un susto... No sabemos cómo fuimos a parar aquí —respondió Eiji con honestidad a la pregunta de Basile.
Eiji se quedó perplejo al escuchar a Basile diciéndole cosas tan terribles a Ash. Sabía que ambos no se agradaban, pero ese odio era algo nuevo. ¿Qué le había hecho su novio para que este hiciera comentarios malintencionados? Aquello hizo enojar a Eiji, quien no dudó en responder al ataque, colocándose entre ambos.
—¿Por qué dices esas cosas tan malas sobre Ash? Tú no lo conoces. Deberías hablar con las personas antes de creer en rumores absurdos sobre ellas... —dijo Eiji, tratando de mantener la compostura. No soportaba cuando alguien emitía un juicio sobre Ash sin conocerlo, debido a que sabía que las personas siempre se tomaban esa libertad cuando se trataba de temas que involucraban a su novio.
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Eiji Okumura
Re: Horror Castle - Evento Halloween
Sentía que se ahogaba, del dolor y la opresión en su pecho sus ojos lagrimeaban. Se dio la vuelta ante el grito del señor, pero sus oídos ya parecían no escuchar mucho.
Taichi me está traicionando…
Taichi está…
Taichi…
¿Dónde…
-Amor, ¿te encuentras bien? –
Está?
Como llamado ante el pánico creciente, allí estaba el castaño de su novio, con su traje de capitán del equipo de fútbol como disfraz –Taichi… -Dijo en apenas un susurro -Déjame revisar eso. Sabes que no debes andar fuera de casa cuando tomas tus pastillas. Ves cosas que no deberías –
El chico de piel tostada lo acercó a una esquina, no tomando en cuenta que con las alas que se cargaba encima habían interrumpido o empujado a una que otra persona, incluso una mujer, muy similar a la que estaba con Taichi hace un momento que se quejaba de que en el tropiezo alguien le había rasgado mal el traje y ahora se estaba casi desnuda.
-¡Taíchi eso duele! – se quejó notando ahora varios puntos de dolor en su mano, No sabía que cara tendría, pero su sorpresa era grande, aun así no había retirado su mano -Te voy a regalar uno de esos juguetes anti-estrés si lo que quieres es apretar cosas. Deja las copas en paz...
-No funcionan y lo sabes. Igual no creo que pueda dejar las copas, mi padre moriría de un infarto, así como si dejara perder la compra de un espacio como este –Dijo intentando distraerse un poco del dolor mientras Yagami sacaba con maestría los fragmentos de vidrio incrustados, no era la primera vez de todas maneras, y agradecía que Tai pudiese atenderlo rápido en incidentes como aquel, sino no podría tocar sus instrumentos. Vio su mano nuevamente y Yamato se preguntó si su mano sería una metáfora de su propio corazón.
–Oye Tai… --Entonces de ser así, Taichi … -¿Qué se supone que haces aquí? –Sería las vendas que impedirían que la sangre siga fluyendo. Que el dolor siga fluyendo… -Dijiste que ibas a estar ocupado con el equipo de fútbol por las fiestas.
Lo curioso es que no había vendas.
¿Cómo entonces pararía de fluir la sangre?
-¿Podrías quitarme estas cosas de la espalda? Pesan demasiado -Dijo intentando distraerse en otra cosa que no sea su propia sangre, lo que creyó ver, -Recuérdame dejar de beber alcohol -
Taichi me está traicionando…
Taichi está…
Taichi…
¿Dónde…
-Amor, ¿te encuentras bien? –
Está?
Como llamado ante el pánico creciente, allí estaba el castaño de su novio, con su traje de capitán del equipo de fútbol como disfraz –Taichi… -Dijo en apenas un susurro -Déjame revisar eso. Sabes que no debes andar fuera de casa cuando tomas tus pastillas. Ves cosas que no deberías –
El chico de piel tostada lo acercó a una esquina, no tomando en cuenta que con las alas que se cargaba encima habían interrumpido o empujado a una que otra persona, incluso una mujer, muy similar a la que estaba con Taichi hace un momento que se quejaba de que en el tropiezo alguien le había rasgado mal el traje y ahora se estaba casi desnuda.
-¡Taíchi eso duele! – se quejó notando ahora varios puntos de dolor en su mano, No sabía que cara tendría, pero su sorpresa era grande, aun así no había retirado su mano -Te voy a regalar uno de esos juguetes anti-estrés si lo que quieres es apretar cosas. Deja las copas en paz...
-No funcionan y lo sabes. Igual no creo que pueda dejar las copas, mi padre moriría de un infarto, así como si dejara perder la compra de un espacio como este –Dijo intentando distraerse un poco del dolor mientras Yagami sacaba con maestría los fragmentos de vidrio incrustados, no era la primera vez de todas maneras, y agradecía que Tai pudiese atenderlo rápido en incidentes como aquel, sino no podría tocar sus instrumentos. Vio su mano nuevamente y Yamato se preguntó si su mano sería una metáfora de su propio corazón.
–Oye Tai… --Entonces de ser así, Taichi … -¿Qué se supone que haces aquí? –Sería las vendas que impedirían que la sangre siga fluyendo. Que el dolor siga fluyendo… -Dijiste que ibas a estar ocupado con el equipo de fútbol por las fiestas.
Lo curioso es que no había vendas.
¿Cómo entonces pararía de fluir la sangre?
-¿Podrías quitarme estas cosas de la espalda? Pesan demasiado -Dijo intentando distraerse en otra cosa que no sea su propia sangre, lo que creyó ver, -Recuérdame dejar de beber alcohol -
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Matt
Conquer
Re: Horror Castle - Evento Halloween
-Me gustaría que dejaras de embriagarte. El último doctor te dijo que no debías mezclar tus pastillas con alcohol. ¿No recuerdas que terminaste en el hospital? Y tuve que soportar a tu padre durante horas mirándome como si yo fuera el culpable cuando tanto él como yo sabemos que eres un experto escondiendo alcohol en lugares inusuales-Taichi recordó otra de las malas experiencias que había pasado con el rubio el día en el que la medicación de este se cruzó con un par de copas. Yamato era como un niño que necesitaba de cuidados especiales.
-Estás demasiado mimado, querido. ¿Qué harías si no fueras rico? Sin papi pagándote los tratamientos médicos y tus intervenciones -Taichi pensó en que la vida de ambos sería mucho más sencilla si su novio dejara sus adicciones de lado. Lo único positivo del comportamiento casi auto-destructivo de Yamato y su mala relación con los medicamentos era que raramente se encontraba lucido , lo que hacía fácil engañarlo.
-Ah... ¿por eso estás aquí? La verdad es que no creo que sea una buena idea invertir tu dinero en este castillo. Es bonito y está bien conservado pero mira dónde se encuentra... es como una mansión en medio de un basurero, piensa en la plusvalía-A Taichi le preocupaba demasiado la forma inconsciente en la que Yamato derrochaba la fortuna de su padre. De ninguna manera iba a permitir que comprara ese castillo, por el bien de ambos.
-Yamato... ¿de qué estás hablando? Nadie se ocupa durante las fiestas, estás delirando otra vez -dijo Taichi, culpando a las drogas de nuevo para escaparse de las preguntas del rubio.
-Pudiste usar un disfraz más atractivo... la próxima vez llama a tu asesor de imagen, él es el mejor para escogerte la ropa -El castaño retiró las alas del disfraz y las dejó apoyadas en la pared. Comenzó a desabotonar la camisa de Yamato, besando su cuello para que se le olvidara el tema de la compra.-Déjame quitarte ese feo disfraz, querido -dijo con un tono sugerente, guiando a Yamato a un lugar oscuro y apartado de las miradas curiosas.
-Estás demasiado mimado, querido. ¿Qué harías si no fueras rico? Sin papi pagándote los tratamientos médicos y tus intervenciones -Taichi pensó en que la vida de ambos sería mucho más sencilla si su novio dejara sus adicciones de lado. Lo único positivo del comportamiento casi auto-destructivo de Yamato y su mala relación con los medicamentos era que raramente se encontraba lucido , lo que hacía fácil engañarlo.
-Ah... ¿por eso estás aquí? La verdad es que no creo que sea una buena idea invertir tu dinero en este castillo. Es bonito y está bien conservado pero mira dónde se encuentra... es como una mansión en medio de un basurero, piensa en la plusvalía-A Taichi le preocupaba demasiado la forma inconsciente en la que Yamato derrochaba la fortuna de su padre. De ninguna manera iba a permitir que comprara ese castillo, por el bien de ambos.
-Yamato... ¿de qué estás hablando? Nadie se ocupa durante las fiestas, estás delirando otra vez -dijo Taichi, culpando a las drogas de nuevo para escaparse de las preguntas del rubio.
-Pudiste usar un disfraz más atractivo... la próxima vez llama a tu asesor de imagen, él es el mejor para escogerte la ropa -El castaño retiró las alas del disfraz y las dejó apoyadas en la pared. Comenzó a desabotonar la camisa de Yamato, besando su cuello para que se le olvidara el tema de la compra.-Déjame quitarte ese feo disfraz, querido -dijo con un tono sugerente, guiando a Yamato a un lugar oscuro y apartado de las miradas curiosas.
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Taichi
Conquer
Re: Horror Castle - Evento Halloween
-No puedo evitarlo, son costumbres difíciles de deshacer- Dijo ante el comentario de su medicación y el alcohol. –No recordaba que te quedaras horas en aquella ocasión –Bueno no es como si lo tuviese totalmente en claro, pasó en coma casi
-Quizá aprender a sobrevivir, no me habría acostumbrado a llevar una vida como la de ahora – Pues esa era una buena pregunta –Quizá me hubiese muerto hace ya tiempo, o terminar internado en alguna parte –Prisión, hospital, de enfermos mentales, Arkham o algo parecido a eso pasaba por la mente del rubio con traje de ángel caído contemporáneo.
-Sabes que yo no decido al final las cosas, mi padre es el que lleva el negocio, si me pide que la compre, y no lo hago yo, mandará a alguien más en un futuro. –Mencionó, además -¿Por qué otra razón debería estar acá?-
Yamato... ¿de qué estás hablando? Nadie se ocupa durante las fiestas, estás delirando otra vez –dijo su novio, interrumpiendo el tren de pensamiento de Yamato –Delirando… -Solo se volteó para que Taichi pudiese remover esas molestas alas con más facilidad.
-No tengo asesor de imagen, de hecho tú cumples ese rol –Un gemido salió de sus labios cuando Taichi paseaba por su cuello, ya sin las molesas alas que le impidiesen un mejor acceso al castaño. Sentía las manos calientes de Taichi por los botones de su camisa, separando cada botón de cada ojal, susrró algo a su oído pero solo podía perderse en las sensaciones. Si sensaciones, quizá era de las pocas formas de disfrutar su presente – Taichi -Se volteó nuevamente, ahora buscando la boca del futbolista que estaba frente a él, lejos de la multitud enfiestada.
Los lentes oscuros que llevaba quedaron olvidados en el suelo, mientras sus manos, avidosas por explorar, iba la una en dirección al cuello y rostro de Yagami, la otra colándose por la camiseta deportiva. El sabor del vino se perdía con el sabor de Tai, así como su mano iba al elástico de los pantalones cortos -¿Tu disfraz? –atinó a decir.
-Quizá aprender a sobrevivir, no me habría acostumbrado a llevar una vida como la de ahora – Pues esa era una buena pregunta –Quizá me hubiese muerto hace ya tiempo, o terminar internado en alguna parte –Prisión, hospital, de enfermos mentales, Arkham o algo parecido a eso pasaba por la mente del rubio con traje de ángel caído contemporáneo.
-Sabes que yo no decido al final las cosas, mi padre es el que lleva el negocio, si me pide que la compre, y no lo hago yo, mandará a alguien más en un futuro. –Mencionó, además -¿Por qué otra razón debería estar acá?-
Yamato... ¿de qué estás hablando? Nadie se ocupa durante las fiestas, estás delirando otra vez –dijo su novio, interrumpiendo el tren de pensamiento de Yamato –Delirando… -Solo se volteó para que Taichi pudiese remover esas molestas alas con más facilidad.
-No tengo asesor de imagen, de hecho tú cumples ese rol –Un gemido salió de sus labios cuando Taichi paseaba por su cuello, ya sin las molesas alas que le impidiesen un mejor acceso al castaño. Sentía las manos calientes de Taichi por los botones de su camisa, separando cada botón de cada ojal, susrró algo a su oído pero solo podía perderse en las sensaciones. Si sensaciones, quizá era de las pocas formas de disfrutar su presente – Taichi -Se volteó nuevamente, ahora buscando la boca del futbolista que estaba frente a él, lejos de la multitud enfiestada.
Los lentes oscuros que llevaba quedaron olvidados en el suelo, mientras sus manos, avidosas por explorar, iba la una en dirección al cuello y rostro de Yagami, la otra colándose por la camiseta deportiva. El sabor del vino se perdía con el sabor de Tai, así como su mano iba al elástico de los pantalones cortos -¿Tu disfraz? –atinó a decir.
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Matt
Conquer
Re: Horror Castle - Evento Halloween
Estando perdido en sus pensamientos, en su avanzada, tardó en darse cuenta que ya sé encontraba frente a la puerta de aquel castillo, una puerta de un tamaño considerable que, por poco, el peliazul casi sé estrellaba con esta, volviendo en sí en un parpadeo..
Aquella puerta sé abrió poco después de que el joven tocase, adentrándose al lugar y perdiendose entre la multitud. Anheru sé dirigió a un lugar que estuviese un poco menos lleno de gente, lo cual fue casi imposible puesto a que ese lugar sé encontraba repleto de invitados, gente con gran variedad de disfraces sé movían de un lado a otro en aquel festejo, pero no veía por ningún lado a los ineptos de sus amigos que, a su parecer, le habían jugado aquella broma de mal gusto, lo único que pasaba por su mente era encontrarlos y preguntarles en que lugar sé encontraba, puesto a que no tenía idea y lo que quería, era salir de ese lugar.
En su disgusto, terminó por olvidar el hecho de que había prometido para sí mismo el no tomar más, así que terminó acercándose hasta uno de los puestos de bebidas y pidió una copa de vino, luego de esa le siguieron varias otras hasta que terminó dejando un poco de lado su disgusto y terminó un poco inmiscuido en el festejo....
-Bah, sólo es un poco de alcohol ¿qué podría pasar?- Dijo el peliazul mientras que bailaba con una de las invitadas...
La distracción del peliazul sé vio desvanecida debido a un personaje que aparecía ante él de una forma molesta, enseguida Anheru no pudo evitar pensar que eso, era aún parte de la bromita que le habían jugado sus amigos y terminó por tomar la mano del individuo que trataba de ver de más, sujetando esta con fuerza y mostrando una pequeña mueca de molestia mientras que sé dirigía a aquel hombre con maquillaje esquelético... -Oye, oye, esa no es forma de presentarte ante alguien que no tiene ni la más remota idea de quien coño eres- Dijo Anheru mientras una de sus cejas sé veía levantada levemente y la otra hacía abajo... -Supongo que esto también es parte de la bromita de los imbéciles de mis amigos ¿no? dime, ¿donde están? estaba tratando de disfrutar de esto, pero ahora, de nueva instancia, me estoy volviendo a poner muy molesto- Dijo el peliazul con una cara completa de seriedad.
Aquella puerta sé abrió poco después de que el joven tocase, adentrándose al lugar y perdiendose entre la multitud. Anheru sé dirigió a un lugar que estuviese un poco menos lleno de gente, lo cual fue casi imposible puesto a que ese lugar sé encontraba repleto de invitados, gente con gran variedad de disfraces sé movían de un lado a otro en aquel festejo, pero no veía por ningún lado a los ineptos de sus amigos que, a su parecer, le habían jugado aquella broma de mal gusto, lo único que pasaba por su mente era encontrarlos y preguntarles en que lugar sé encontraba, puesto a que no tenía idea y lo que quería, era salir de ese lugar.
En su disgusto, terminó por olvidar el hecho de que había prometido para sí mismo el no tomar más, así que terminó acercándose hasta uno de los puestos de bebidas y pidió una copa de vino, luego de esa le siguieron varias otras hasta que terminó dejando un poco de lado su disgusto y terminó un poco inmiscuido en el festejo....
-Bah, sólo es un poco de alcohol ¿qué podría pasar?- Dijo el peliazul mientras que bailaba con una de las invitadas...
La distracción del peliazul sé vio desvanecida debido a un personaje que aparecía ante él de una forma molesta, enseguida Anheru no pudo evitar pensar que eso, era aún parte de la bromita que le habían jugado sus amigos y terminó por tomar la mano del individuo que trataba de ver de más, sujetando esta con fuerza y mostrando una pequeña mueca de molestia mientras que sé dirigía a aquel hombre con maquillaje esquelético... -Oye, oye, esa no es forma de presentarte ante alguien que no tiene ni la más remota idea de quien coño eres- Dijo Anheru mientras una de sus cejas sé veía levantada levemente y la otra hacía abajo... -Supongo que esto también es parte de la bromita de los imbéciles de mis amigos ¿no? dime, ¿donde están? estaba tratando de disfrutar de esto, pero ahora, de nueva instancia, me estoy volviendo a poner muy molesto- Dijo el peliazul con una cara completa de seriedad.
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Anheru
Gold Saint
Re: Horror Castle - Evento Halloween
Mientras conducía a su novio confundido a través de ese castillo lúgubre, esquivando a los invitados disfrazados, Taichi se detuvo al ver una luz al final de un pasillo. Pensó que era una salida pero, en realidad se trataba de una habitación con una cama con dosel, decorada como el resto del castillo: parecía el escenario de una película de terror, aunque al mismo tiempo transmitía tranquilidad y seducción debido a los colores rojos de las cortinas y sábanas, así como la presencia de numerosos arreglos con flores. Flores de muerto, adornando ese lugar con su vibrante color naranja.
Taichi arrojó al rubio a la cama antes de cerrar la puerta. La mejor forma de llegar a un acuerdo era por medio de la negociación, y el moreno sabía muy bien cómo convencer a Yamato de todo lo que quisiera. Los hombres poderosos eran fácilmente controlables cuando se utilizaba el sexo, un recurso que el futbolista dominaba.
Se despojó de su camisa y, con una sonrisa pícara en el rostro, introdujo sus pulgares debajo del elástico de su ropa interior, bajándola por completo junto a sus pantalones cortos, quedando totalmente desnudo frente al rubio.-Me siento más cómodo así -dijo el castaño, luciendo sus músculos y su piel bronceada para el joven heredero.
Se abalanzó sobre Yamato, besándolo por todas partes mientras las prendas de su amado salían volando por los aires. Taichi se sentó con las piernas abiertas en el regazo de Yamato. Su miembro rozaba con el abdomen plano de su chico, presionando su erección contra la piel pálida de Yamato. Podía sentir que el amiguito de Yamato también había revivido, ya que este estaba endureciéndose como roca bajo su trasero.-Feliz Halloween -dijo el castaño con una sonrisa antes de besar apasionadamente al rubio.
-Dime que ya no te interesa comprar este castillo espantoso... ni siquiera tiene calefacción, se me está congelando el trasero aquí adentro. Supongo que no importa mientras sigas abrazándome -dijo con una sonrisa ladina, hundiendo su rostro en el cuello de su amante, buscando su calor.
Taichi arrojó al rubio a la cama antes de cerrar la puerta. La mejor forma de llegar a un acuerdo era por medio de la negociación, y el moreno sabía muy bien cómo convencer a Yamato de todo lo que quisiera. Los hombres poderosos eran fácilmente controlables cuando se utilizaba el sexo, un recurso que el futbolista dominaba.
Se despojó de su camisa y, con una sonrisa pícara en el rostro, introdujo sus pulgares debajo del elástico de su ropa interior, bajándola por completo junto a sus pantalones cortos, quedando totalmente desnudo frente al rubio.-Me siento más cómodo así -dijo el castaño, luciendo sus músculos y su piel bronceada para el joven heredero.
Se abalanzó sobre Yamato, besándolo por todas partes mientras las prendas de su amado salían volando por los aires. Taichi se sentó con las piernas abiertas en el regazo de Yamato. Su miembro rozaba con el abdomen plano de su chico, presionando su erección contra la piel pálida de Yamato. Podía sentir que el amiguito de Yamato también había revivido, ya que este estaba endureciéndose como roca bajo su trasero.-Feliz Halloween -dijo el castaño con una sonrisa antes de besar apasionadamente al rubio.
-Dime que ya no te interesa comprar este castillo espantoso... ni siquiera tiene calefacción, se me está congelando el trasero aquí adentro. Supongo que no importa mientras sigas abrazándome -dijo con una sonrisa ladina, hundiendo su rostro en el cuello de su amante, buscando su calor.
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Taichi
Conquer
Re: Horror Castle - Evento Halloween
No podía creer la velocidad en la que llevaban las cosas, manos por un lado, bocas por otro, los roces por sobre y debajo de la ropa, ya no hay prendas. Solo quedan sensaciones.
Yamato no podía hacer más que clamar por Taichi, por sus atenciones, no importándoles el extraño, pero seductivo espacio en el que se hallaban. Los gemidos del rubio
El sudor aparecía sobre sus pieles, dándoles un brillo atrayente, mezclado con la saliva y olor a sexo, vino y sangre que ya levantaba en el lugar, junto a unos amiguitos que esperaban salir a jugar.
-Feliz Halloween –La sonrisa ladina, la piel bronceada, cómo enterraba su boca en el punto exactoentre su cuello y su clavícula para hacerlo gemir y olvidar sus obligaciones… ¿Qué obligaciones? ¿La herida en su mano? No, servía para seguir marcando a Taichi con su sangre, haciéndole suyo, para alejar a aquellos que quieran arrebatárselo.
Quizá la única que tenía era ayudar al mini Tai a que no se congelara. Le abrazó, como se lo estaba pidiendo, mientras sus manos seguían recorriendo los centímetros de la piel tostada, acariciando su entrado trasero y centrándose en hacer ficción entre ambos miembros aprovechando la postura en que los había dejado el capitán de futbol era idónea para ello.
Frotar, calor, correr, las sábanas rojas salían de sus posiciones entre más se movían. Una respuesta a comprar… -Comprar ¿qué…? No –Otro gemido salía, sus mejillas estaban rojas, y era más claras las marcas en su cuerpo que en las de su novio. –Tai alcanzó a decir, mordiendo el hombro del castaño, mientras su liberación estaba próxima a llegar.
Yamato no podía hacer más que clamar por Taichi, por sus atenciones, no importándoles el extraño, pero seductivo espacio en el que se hallaban. Los gemidos del rubio
El sudor aparecía sobre sus pieles, dándoles un brillo atrayente, mezclado con la saliva y olor a sexo, vino y sangre que ya levantaba en el lugar, junto a unos amiguitos que esperaban salir a jugar.
-Feliz Halloween –La sonrisa ladina, la piel bronceada, cómo enterraba su boca en el punto exactoentre su cuello y su clavícula para hacerlo gemir y olvidar sus obligaciones… ¿Qué obligaciones? ¿La herida en su mano? No, servía para seguir marcando a Taichi con su sangre, haciéndole suyo, para alejar a aquellos que quieran arrebatárselo.
Quizá la única que tenía era ayudar al mini Tai a que no se congelara. Le abrazó, como se lo estaba pidiendo, mientras sus manos seguían recorriendo los centímetros de la piel tostada, acariciando su entrado trasero y centrándose en hacer ficción entre ambos miembros aprovechando la postura en que los había dejado el capitán de futbol era idónea para ello.
Frotar, calor, correr, las sábanas rojas salían de sus posiciones entre más se movían. Una respuesta a comprar… -Comprar ¿qué…? No –Otro gemido salía, sus mejillas estaban rojas, y era más claras las marcas en su cuerpo que en las de su novio. –Tai alcanzó a decir, mordiendo el hombro del castaño, mientras su liberación estaba próxima a llegar.
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Matt
Conquer
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