Las Hadas Etéreas [Diana y Calliope]

por **Kaito** Jue Nov 23, 2017 11:40 pm

Recuerdo del primer mensaje :

Sinopsis: Los telquines son una raza de hechiceros con cabeza de perro, torso de hombre y cola de pez. Vivieron en el anonimato durante la era en la que los dioses del Olimpo reinaban, manteniéndose escondidos en la sociedad humana utilizando sus habilidades de transformación. Después de permanecer en una posición neutral durante mucho tiempo, han decidido que es el momento para levantarse al ser testigos de la destrucción causada por Loki y Eris, fijándose como primer objetivo localizar a las Hadas Etéreas y usar su poder para abrir un portal hacia el Olimpo con el fin de difundir su voluntad a través del trono de Zeus. Tu misión será evitar que esto ocurra viajando al mundo en el que éstas antiguas deidades se esconden, siendo invocado por ellas para que las ayudes a pelear contra sus nuevos enemigos.

Indicaciones: Copien y pegue el dado random en su post.

Código:: [rand]1,3[/rand]

Etapa 1:

Ambas son invocadas en el castillo de tres deidades espirituales. Sus cuerpos están hechos de energía pura, cuatro alas parecidas a hojas brotan de su espalda y hablan con voces gentiles. No responden a nombres, dicen que son seres que viven fuera del tiempo y el espacio. Ellas les explican su situación actual, les hablan de las horribles criaturas que están detrás de sus poderes. Antes de que puedan decirles el motivo por el que los telquines las necesitan, el castillo comienza a colapsarse.

1.-Rescatas a las Hadas de morir aplastadas bajo los escombros.-Avance a fase 1-
2.-El techo cae sobre ti, ocasionando que pierdas de vista a tu compañera y a los seres que debes proteger -lanza de nuevo-
3.-Una flecha envenenada roza tu hombro, provocando una sensación de mareo impresionante.-No puedes lanzar dado por 1 turno-

Etapa 2:

Consiguen huir del castillo, siendo guiadas por las Hadas a través de las arenas del tiempo que cubren aquella dimensión solitaria conformada por un gran desierto, un cielo estrellado y edificios pertenecientes a diferentes periodos de la historia humana. Deben apresurarse, los Telquines están cerca.

1.-Buscan refugio en una torre vacía repleta de habitaciones con forma de hexágono. Al cruzar la puerta activan las trampas de la torre, provocando que ésta se transforme en un laberinto, causando que pierdan de vista a las hadas. -lanzar dado de nuevo-
2.-Dos Telquines rastrean su aroma y las localizan en el desierto, atacándolas a ambas antes de ir por sus verdaderas presas. Deben derrotarlos para no convertirse en el aperitivo. Deberán lanzar dos dados de acción adicionales para los telquines cada una y editar según el resultado. -lanzar de nuevo al terminar la pelea-

Telquines:
Fuerza: 3
Resistencia: 2
Cosmos: 3
Velocidad: 2

HP: 10

3.- Aparecen en la entrada de un buque de guerra abandonado en medio del desierto. Las Hadas les indican que es un lugar seguro y se esconden en un viejo cuarto de máquinas -avance a fase 3-

Etapa 3:

1.-El hada líder les habla sobre su relación con el Olimpo y la razón por la que ellas tienen el poder de abrir un portal hacia el reino donde habitan los dioses.

Diálogo: -Zeus nos otorgó la llave de las puertas del Olimpo para regresar a su trono si las puertas no se abrían para él. Somos seres de energía pura, eternas, no vivimos dentro del espacio y el tiempo, hemos tenido este aspecto desde la creación del universo. -Pase a fase 4-

2.-Escuchan ladridos en el exterior. Al salir a revisar a través de una vieja escotilla se encuentran con una escena perturbadora: cientos y cientos de perros negros con brazos humanos y colas de pescado las rodean. Una de las Hadas Etéreas es capturada, deberás salvarla antes de que consuman su magia. Lanza tres dados de acción: si dos de ellos son números pares salvas al Hada, si son dos número impares, el Hada será borrada y perderán la oportunidad de recibir el Don de la Oscuridad.

3.-Un Telquin logra escabullirse en el interior del buque de guerra, disparando flechas con veneno desde su hocico. Su objetivo no eres tú, es el Hada que se encuentra detrás de ti. Deberás demostrar tu valor protegiendola como un escudo humano. Lanza dado acción equivalente al número de puntos de velocidad que tienes. Si te toca un 6, 7 u 8 podrás defenderte, si el número es menor perderás cinco puntos de HP y la oportunidad de obtener Aliento de la Naturaleza.

Etapa 4

Su escondite es destruido por una esfera de energía gigante, dejándolas expuestas. En medio de una nube de humo negro aparecen los responsables. Los hechiceros han adaptado formas humanas y portan armas oscuras como sus armaduras. El HP de estos guerreros es compartido, al igual que los stats, sólo tienen que lanzar dos dados de velocidad para ellos y hacer los cálculos normales.

Stats:

Telquines:
Fuerza: 5
Resistencia: 2
Cosmos: 3
Velocidad: 2

HP: 10

Etapa 5

Han derrotado a los Telquines de rango inferior, sin embargo su líder continua en pie.Él está decidido a hacer todo lo que éste en sus manos para obtener el poder que le permitirá conquistar el trono del poder. Recita un hechizo en un lenguaje desconocido, transformándose en una criatura de diez metros con cuerpo de reptil y cabeza cubierta por un casco de hueso. A pesar de su tamaño, es muy veloz y se mueve con facilidad sobre la arena. Su transformación lo dota de poder y velocidad, pero su cuerpo es bastante vulnerable. En esta ronda, el stat más alto del monstruo será el de velocidad, por lo que tendrán que lanzar una cantidad de dados iguales para él en sus posts. Tendrán que lanzar dados y editar con el resultado. Tiren tres dados de velocidad para el monstruo cada uno.

Rey Telequin
Fuerza: 2
Velocidad: 6
Resistencia: 1
Cosmos: Nulo.

HP: 30

En caso de Victoria: Las hadas les otorgan cualquiera de los tres dones que poseen.

En caso de derrota: Las hadas mueren y las regresan a su mundo antes de que el Telequin Mayor les haga daño.

Premio adicional: Pase para realizar la parte dos de esta misión ("El Trono del Poder") si la terminan con las tres hadas vivas.

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 7:08 pm

Cada paso era una pequeña victoria, pues para Diana significaba que estaba avanzando. ¿Hacia dónde? Quien demonios sabía, y a quién demonios le importaba. Bien podría estar metiéndose más y más al interior de aquel castillo de las criaturas fotoluminosas con forma de hombres, o mujeres, o algo y alitas. Pero si Diana estaba en lo correcto, entonces no importaba hacia donde avanzase. El castillo estaba derrumbándose por todos lados, lo cual significaba que eventualmente mientras no cambiase de piso, encontraría una salida. Diana solo tenía que sobrevivir la destrucción del lugar.

Algo de fortuna parecía estar regresando pues con cada paso Diana se sentía mejor. Ya poco a poco su andar era menos arrastrarse, y más levantar el pie y ponerlo enfrente del otro. Con algo de tiempo y con suficiente fortuna, Diana creia que lograria llegar a un andar más normal, donde no pareciese que estaba intentando evitar caer de la cuerda floja, o pasar el examen de sobriedad después de haber sido detenida por un policía que estaba dispuesta a dejarla ir a cambio de un pequeño favor. Diana solo tenía que seguir adelante, como toda una guerrera de Athena, o al menos lo que el Pedobear de Sotana decía debían de ser.

Pero tal parecía que en verdad la suerte no estaba con Diana. Quizas habia hecho enojar a una bruja vudú o quizás su choza estaba construida encima de algun cementerio de indios, o habia roto un espejo, o acariciado demasiados gatos negros en su existencia. El punto era, que Diana comenzó a escuchar un estruendo detrás de ella, y solo fue capaz de voltear la mirada para observar como un pilar comenzaba a caerse encima de donde estaba, - ¡AY NO MAMES! - el golpe fue tremendo, y solo fue capaz de abrazar a la columna para evitar que el daño terminase en su cabeza.

Número aleatorio (1,3) : 2

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 7:21 pm

La dama de cabellos rubios y gesto amargo avanzaba sin prisa en direccion de las ruinas de aquel extraño y vetusto lugar. Al principio habia tratadon de avanzar con prisa, pero se habia visto obligada a bajar un poco la velocidad conciente de que las hadas cubiertas de brillantina trataban de seguirle el paso y de que, a pesar de odiar la idea, era su deber cuidar de aquellas cosas inutiles.

No era como si desease el realmente el ver de vuelta a la amazona protectora del manto de Ballena, pero sabia bien que no quedaria bien parada ante el caballero protector de la segunda casa si llegaba solo cargando alguna de las extremidades de su compañera. Stan de Tauro habia sido bien claro con ella, no queria que algun otro compañero pereciera por su culpa, ya fuese directa o indirectamente. Por otro lado tenia que cumplir los deseos de la inutil de Athena y fungir, de cierta manera, como embajadora con aquella raza de entes luminosos.

Al contemplarles en su fragilidad e ineptitud le quedaba ciertamente claro el por que se encontraban en peligro de extincion. Si ella misma formara parte de los teletubies, o tarahumaras o como quiera que se llamase aquella raza quimerica, tambien buscaria la forma de deshacerse de ellas.

-Augusta amazona de plata... Exclamo una de las molestas voces a su espalda tratando de llamar su atencion. Calliope meramente le ignoro, sabiendo que alguna estupides se le diria. Ya podia contemplar las derruidas ruinas de lo que qudaba del arco de entrada, podia sentir tambien el cosmos suave e intermitente de la compañera perdida entre los escombros. Se encontraba a punto de introducirse nuevamente entre los escombros cuando un nuevo tremor le hizo retroceder un paso para proteger a aquellas chinches brillantes.

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 7:27 pm

Aquello ya era demasiado. Realmente era demasiado. “Capaz y en algún momento de mi vida me volví imán de escombros”, pensó Diana mientras sentía como la columna le había sacado de una forma muy violenta el oxígeno de sus pulmones y como estos estaban buscando recuperarlo a como diese costa. De no ser porque había entrenado para ese tipo de situaciones y porque Diana era una experta en mantener al cuerpo privado de oxígeno por largos periodos de tiempo, sobre todo cuando algo le estaba obstruyendo el ducto seguido al respiratorio, hubiese terminado perdiendo el conocimiento. En ese instante seguía consciente, solamente deseando fuertemente el no estarlo.

La columna no era mucho problema para Diana, pues la amazona de plata había sido forzada a cargar cosas igual de pesadas por peligrosos y empinados riscos con la promesa de una muerte puntiaguda si era que fallaba cuando aún estaba entrenado para el puesto. Aun con el constante desequilibrio y el daño que había estado recibiendo al sentir como un gigantesco pedazo de castillo tras otro decidían que Diana era el blanco de aterrizaje, no debería ser muy problemático para ella el deshacerse de la columna que la estaba aplastando. Inclusive en aquellos momentos le había levantado lo suficiente para poder respirar bien, y se había acomodado para estar más cómoda bajo el gigantesco pilar.

No, el salir de aquel predicamento no debería ser muy difícil para Diana. Pero se sentía muy agotada. No necesariamente en lo físico, pues tal y como había logrado reacomodarse podía deshacerse del soporte con facilidad y continuar con su andar sin mucho problema. No el agotamiento era más emocional. Se sentía que el universo se divertía de lo lindo con ella. Diana confirmó esto, cuando de pronto otro pilar se derrumbaba y caía justo encima del anterior, aplastandola de nuevo.

Número aleatorio (1,3) : 3

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 7:49 pm

-¡CON UN TOTAL Y MALDITO DEMONIO!- gritó con fuerza Diana, al momento en que sentía el peso adicional de la segunda columna caer justo encima de la primera, haciendo bolita como dos malditos niños de primaria que decidían que era divertido ver cuanto peso podría soportar la pobre chica rubia abajo de los dos estudiantes más obesos de la clase. Lo bueno habia sido que al reacomodarse había dejado sus brazos frente al resto de su cuerpo, de tal forma que la habían logrado defender su pecho del impacto que muy probablemente le hubiera sacado el aire de nuevo.

” Esto ya es demasiado universo, se que me puedes escuchar aquí adentro, demasiado. ¡Osea, en verdad te pasas, como es posible que no una, no dos, sino quien sabe ya cuantas veces me hayan caído distintos pedazos de castillo encima! ” Diana gritaba internamente mientras preparaba un plan para salir de ese predicamento en el cual se encontraba. Plan que terminó lanzando por la borda y simplemente elevo su cosmos lo suficiente para deshacerse de los escombros, y salir de debajo de los pilares.

- ¡Ja! Qué te parece eso maldito marica de...mierda - Justo en medio de su celebración, Diana sintió una incomodidad sobre su hombro. Volteando a ver de qué se trataba, pudo notar una flecha protuberando justo debajo de su armadura, y otra que parecía apenas acaba de entrar bajo su piel. Por desgracia eso fue todo lo que pudo notar, ya que inmediatamente después Diana sintió un potente mareo que hizo que todo comenzase a dar más vueltas que un paseo por las tazas locas. Para su buena suerte, volteando hacia donde debería de ir esa flecha, noto a la amazona de Grulla, sintiendo por primera vez felicidad de verla. Corriendo lo mejor que pudo, Diana las alcanzó y se dispuso a salir ya de ese lugar.

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 7:58 pm

No bien la mujer había puesto su pie dentro de lo que quedaba del castillo cuando un proyectil lanzado desde las sombras paso rozando su mejilla a pocos milímetros de penetrarle la piel. Los sentidos de la rubia se aguzaron y logro con un ágil salto esquivar una decena más que emergieron en su dirección. –Diana, ¿Qué demonios haces? –Exclamo regresando sobre sus pasos en dirección de las inútiles hadas que se abrazaban y gemían como alimañas viéndose rodeadas por el peligro.

Con rapidez, la guerrera del Santuario les rodeo con sus brazos y se impulsó para saltar unos metros sobre el suelo. En el lugar donde momentos antes se había encontrado el grupo de brillantes insectos una decena de saetas se clavaba en el suelo para posteriormente convertirse en humo oscuro y desaparecer en el aire. –Eso sí que es curioso… -Declaro mientras aterrizaba a unos metros del lugar de ataque, colocando a las desconcertadas hadas en el suelo. Estas temblorosas se abrazaron a las pantorrillas de la mujer agradeciéndole con sus voces estridentes y mojigatas. –Silencio… -Les ordeno sondeando las sombras con su mirada penetrante. Obviamente alguien no les quería ahí.

-¿Cuántas veces tenemos que decírtelo mujer? Nuestros enemigos no están jugando, nuestras vidas y las suyas guerreras corren grave peligro. Declaro con voz apremiante la que parecia ser el líder de las hadas. Grulla apretó sus puños ante el dilema que se le presentaba. Era obvio que no podia dejar atrás a esas molestas cosas, pero la vida de Cetus podia estar en peligro en el interior de las ruinas.

Grulla contemplo un momento mas sus posibilidades y tras un segundo aparto con un empellón a las Hadas y comenzó a avanzar hacia el castillo derrumbado. Sin embargo, su andar quedo interrumpido cuando alcanzo a vislumbrar a la guerrera de Cetus emergiendo de las sombras llena de polvo, despeinada y con dos flechas clavadas en el mismo hombro. –¿Qué carajo? Murmuro la chica asombrada y levemente aliviada. Lanzando un suspiro se giro hacia las hadas que sonreían y aplaudían. –Paren eso, será mejor que nos guien a donde quiera que deseen llevarnos.

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OFFTOPIC [después de mil post extras e innecesarios) FIN DE LA PRIMERA FASE

TIRADA DE SEGUNDA FASE:

Número aleatorio (1,3) : 1

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 8:15 pm

Diana no se había detenido para intercambiar saludos ni exclamaciones de felicidad al volver a ver a su clon chinotailandes con cabello de paja. Mucho menos se quedo a ver si la amazona de Grulla había decidido que si estaba corriendo hacia afuera lo mejor que podía hacer era el seguirla lo mas rapido posible, o si en un estado de sorpresa había decidido preguntarse qué pasaba y todavía más, si su curiosidad le había ganado para voltear hacia atrás para ver que era de lo cual huía. Diana confiaba en que la guerrera que compartía su rango era lo suficientemente inteligente como para saber que si estaba huyendo era por algo.

El desierto se extendía frente a las dos, de una manera que fácilmente podría describirse como eterno. Pero cualquiera que alguna vez hubiese estado en medio de un desierto, ya fuese porque disfrutaba de visitar lugares exóticos, o habia llamado la atencion de algun principe arabe quien le invitó para entretenerle con intenciones poco decorosas sabia que esa era una ilusión de las arenas. Aunque en aquel lugar, Diana se preguntaba si existía la posibilidad de que el desierto si fuese eterno.

Bueno, eso daba igual al final. Diana había corrido al lugar que le pareció el más seguro en la vecindad: Una torre hexagonal que se levantaba como un monolito en medio del desierto. Al llegar hasta la entrada, Diana se dio la vuelta para observar a su compañera y a las criaturas que justo recordaba debían de estar protegiendo. Dejo que estas pasasen primero, solo para escuchar con horror un poderoso sonido mecánico, y alcanzar a observar como varias paredes se levantaban velozmente y hacían que perdiera de vista a las Hadas. - Puta Madre! No otra vez! Marco! - Diana gritó entrando en un intento de localizar a los entes de luz.

Número aleatorio (1,3) : 1

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 8:27 pm

Y las cosas volvían nuevamente a ponerse mal, por poco ortodoxo que pareciese la amazona guerrera había hasta disfrutado su caminata por el desierto. Era la primera vez que conocía un lugar como ese y aun en su simpleza y monotonía, la chica que nunca había abandonado el Santuario se sentía cómoda respirando el caliente aire que le rodeaba. En silencio y guardando una distancia decente de las hadas y de Cetus que encabezaba el convoy, la mujer se deleitaba del momentáneo respiro que lograba alcanzar.

Ya habían avanzado un buen tramo cuando sus ojos divisaron a lo lejos la estructura que sobresalía en medio de aquel panorama. Ciertamente era desconcertante, pero suponía que en aquel extraño lugar cosas como esa era “normales”. Se preguntaba si pronto observarían algún kraken rosa atravesar el cielo o a un unicornio morado correr entre las arenas. Todo parecía posible.

Al llegar a la construcción, la mujer comenzó a analizar su estructura exterior, intrigada por esta y el misterio que le envolvía. Algo no estaba bien y no era segura. Se giraba ya en torno de Cetus para detenerle cuando pudo escuchar el chasquido mecánico que les separaba, nuevamente, de aquellas molestas entidades de poco cerebro y gran brillo. –NO! –Exclamo con frustración mientras ante sus ojos impávidos se elevó una placa de metal. Aquello estaba jodido. Su compañera comenzaba a gritar a su costado cual si eso fuese a resolver algo. –Cállate, no me dejas pensar… -Le rugió mientras apretaba los puños y comenzaba a tocar la pared buscando algún mecanismo oculto no queriendo adentrarse en aquel maldito lugar.

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TIRADA DE LA SEGUNDA FASE

Número aleatorio (1,3) : 2

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 8:32 pm

El pequeño tic en el ojo, era la única señal que mostraba el mal humor que Diana estaba sintiendo en ese momento. Se arrepentia de haber sentido cosa alguna parecida a la alegría al haber visto de nuevo a la amazona faltante de tetas, culo, caderas y demás. - Perdóname, oh sabia guerrera, pero de que te va a servir ahorita ponerte a pensar cuando debemos de encontrarlas lo más pronto posible antes de que nos alcancen. - Diana respondió ante el gruñido apenas distintivo como palabras por parte de su compañera. El mal humor de esa mujer siempre la ponía de malas.

Lo peor era que dicho y hecho, tan pronto como Diana había terminado de expresar la necesidad de apurarse, dos de las cosas perro-hombre-pez habían logrado atravesar el desierto entre las ahora ruinas del castillo y la torre donde habían decidido buscar refugio. - ¡Me lleva la chingada...Grulla! ¡Te toca el de la derecha! ¡Yo me encargo del de la izquierda! ¡No se te ocurra morir maldita espantapájaros! - Sin esperar a que se acercaran lo suficiente, Diana lanzó su helada ofensiva.

Haciendo danzar a su contrincante, Diana lanzaba una tras otra varias estacas de hielo con las cuales atravesar al extraño ser quimérico. La primera ola ofensiva había tomado por sorpresa a la criatura, y esta había terminado tomando de lleno la fuerza de su ataque. La segunda vez, estaba más preparada y se había dispuesto a defenderse, sin embargo Diana cambió el ritmo y logro romper la defensa lo suficiente para causarle daño nuevamente.

Combate:

Diana:
Acción 1 - Ataque (7): 3 Fuerza + 1 Velocidad + 1 Cosmos = 5
Acción 2 - Ataque (7): 3 Fuerza + 1 Velocidad = 4

HP Diana: 30
Acciones: 13/15

Telquin:
Acción 1 - Defensa (4): 2 Resistencia + 1 Velocidad = 3/2 = 1.5
Acción 2 - Falla

HP Telquin: 10 - 9 + 1.5 = 2.5
Acciones: 14/15

por **Narrador** Sáb Nov 25, 2017 8:32 pm

El miembro 'Diana Wales' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

#1 'Acción' : 7, 7

--------------------------------

#2 'Acción' : 4, 1

por Invitado Sáb Nov 25, 2017 9:16 pm

La situación empeoraba a momentos, la guerrera de grulla se giró solamente para esquivar un ataque repentino lanzado por aquellos entes extraños. Calliope se impulso sobre sus pies con un alto salto alejándose de la guerrera de Cetus y su enemigo para darle campo de accion. Ella misma necesitaría algo para poder librarse de aquel ser.

-Si que son feos ustedes, creo que seria mejor que regresaran a al oscura mazmorra donde se encontraban. No hace falta que escriban. Comento grulla con una sonrisa amplia mientras comenzaba a andar con lentitud en derredor de su enemigo, observándole con atención. Este se limito a contemplarle con sus ojos carentes de expresión, vacios cual dos canicas veladas. Su hocico entreabierto dejaba colgando una lengua oscura y humeda que se movia con cada respiración del ente. De cuando en cuando lanzaba un gruñido cuando sentía que la mujer disminuia la distancia que segura los separaba.

-Tranquilo Fido, esto será lento… sere gentil contigo. Comento deteniéndose mientras elevaba su cosmos, un aura brillante le rodeo al tiempo que la mujer elevaba ambos brazos, la arena en derredor de ella comenzó a flotar formando dos torbellinos a su espalda y al tiempo que la chica dejaba caer sus brazos esos torbellinos se lanzaron con velocidad sorprendente en dirección del telquin el cual, viéndose atacado por ambos costados dudo un segundo hacia el lugar al cual dirigir su defensa.

Aprovechando eso, la mujer hizo girar unos grados el torbellino de mayor tamaño logrando golpear secamente el costado de la bestia, la cual fue desplazada algunos metros en retroceso. Un aullido de furia se elevo de su desagradable garganta mientras emprendia la carrera en contra de grulla.

++++++++++++++++++++++++++++++++++

SEGUNDA FASE
DESCRIPCION DE ACCIONES

CALLIOPE

Ataque #1 (5): 2(f) + 1.5(v) + 2 (c) = 5.5/2 = 2.7
Ataque #2 (2): 2(f) + 1.5(v) = 3.5/4 = 0.8

HP: 30
Acciones: 13/15

TELQUIN
Defensa #1 (2): 2(r) + 1(v) = 3/4 = 0.7
Defensa #1 (2): 2(r) + 1(v) = 3/4 = 0.7

HP= 10 – [(2.7-0.7) + (0.8-0.7)] = 10 – 2.1 = 7.9
Acciones: 13/15

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