La balanza y el centauro [Priv. May Sheen Woo]

Recuerdo del primer mensaje :

- Llamen a Dorian de Sagitario.
- Como ordene, Patriarca.

La orden se dio, el Santo Dorian de Sagitario fue llamado por el pontífice del Santuario, el cual le dio una misión que, si bien era secundaria y le faltaban probabilidades de tener combates serios, en dado caso de que los tuviera, sería demasiado peligroso para un Santo de menor rango que el de oro.

-- ¿Qué ocurre, patriarca? -- Consultó Dorian arrodillado frente al poderoso hombre que se encontraba sentado en el trono del Santuario
- Hay rumores de que algunos ejercitos enemigos se están reuniendo en los alrededores de la ciudad Kaus, debes ir a verificarlo. Pues como has de conocer, los batallones enemigos pueden ser demasiado fieros para nuestros caballeros de menor rango en estos momentos. - Ordenó el Patriarca con voz severa y a la vez compasiva, imponiendo respeto y a la vez dando ánimos al caballero dorado.

A pesar de no ser el patriarca al que Dorian había entregado su lealtad siglos atrás, no dudó en cumplir lealmente con la orden del Patriarca, por lo que, usando la velocidad que le concedía su poder de Caballero Dorado, llegó al lugar en cuestión de segundos al salir de las Doce Casas

Verificó las cercanías de la ciudad Kaus tan pronto llegó hecho un meteoro de luz, caminó lentamente en busca de algún signo de actividad enemiga en el lugar, siempre alerta por si algo se salía de control.

-- Aioros... --

Dijo suavemente Dorian con una expresión mas vacía y con un tono de voz teóricamente inaudible, pero que se podía escuchar debido al gran silencio que se remontaba en el escenario, dejando que Sagitario se vertiera más en sus pensamientos de lo común, recordando las pruebas que el mismo fantasma de Aioros había puesto sobre el para ser "digno" de la Armadura de la constelación del Centauro alado, aunque en el pasado haya logrado dicha prueba, sin tener que ser sometido por otro Santo de Oro.

Si, le dio importancia a aquel nombre. Alzó la mirada al cielo, viendo las nubes pasar mientras recordaba esos días, exclamándo en su interior la alegría de haber "conocido" a Aioros, el Santo de Sagitario legendario en la historia a la que, de cierta forma no correspondía Dorian.

Posteriormente, cerró los ojos y volteó hacia May.

--Si tu madre llegó a conocer a Aioros, o por lo menos saber su leyenda, es porque ella también fue legendaria en su labor. Espero que su hija también lo sea. --

Mi madre Conoció a lo más legendarios santos me decia que el poder de un santo no viene de su cosmos o su armadura sino de su valor y su corazón La armadura no hace al guerrero sino el valor ya virtud que tenga, Percibo tu cosmos es cálido Eso demuestra que eres digno de llevarla armadura dorada de sagitario.

Se dio vuelta y le dedico una sonrisa era muy raro verla era una sonrisa cálida y bondadosa Algo raro en la santa de libra, Lo Miro y después prosiguió caminando Para Cambiar la conversación.

Debes ser bueno con el arco es Algo natural en los que portan la armadura dorada de sagitario Me gustaría ver una demostración algún día si no te molesta, Me da curiosidad ver ese famoso arco dorado.

-- Espero que no se ofenda, pero me ha sorprendido el ver su personalidad sonriente, no pensé poder apreciar dicha faceta al día de conocerla. --

Afirmó Dorian al momento que le miraba, retrayendo un poco su postura, al punto de retroceder ligeramente con un paso, que hizo que las plumas de oro que alas de la cloth de Sagitario sonasen como cristales golpeándose los unos a los otros, en un continuo tintineo que no paró hasta que recobró la postura junto al paso que había retrocedido, ahora alegre por verle contenta, e interesada en hacer conversación.
Se sonrojó levemente, casi de forma milimétrica, sintiéndose adulado por el cumplido de su compañera.
Rió un poco con los ojos cerrados, para luego decirle lo siguiente con un tono lleno de confianza

-- Esperemos el día en el que compartamos el campo de batalla, para mostrarte qué tanto poder tiene el arco de Sagitario. --

Mi madre decía que siempre es bueno llevarse bien con los que comparten tus mismos ideales y siguen tu mismo camino y transitan por él, Seguimos el legado de aquellos que nos precedieron y, Es nuestro deber preservarlo y pasarlo a otros cuando llegue ese momento por eso será siempre un placer y un honor estar con cualquiera que luche por lo mismo que yo sea del rango que sea en especial nosotros los dorados encargados de ser el baluarte de los deseos de paz y justicia de nuestra diosa athena y que se trasmiten a través de nuestro gran patriarca.

Siempre será un honor el combatir contigo centauro dorado, y si caigo al menos sabré que será con alguien que luchara hasta el final, eso es lo que me da satisfacción.

Hizo un gesto de sonrisa.

No quiero imaginar el que deba de limpiar este lugar lo compadezco Tú crees lo mismos verdad