Llegada del juez de Wyvern

por Melira Miér Abr 26, 2017 4:18 pm

La joven de cabellos rubios por fin llegaba a los territorios de su amado dios hades, por algún motivo sentía una cercanía muy profunda con el sin embargo era algo que no se explicaba así que mientras caminaba por los senderos que solo los espectros o jueces del inframundo podrían cruzar sin ningún problema, la chica admiraba como el manto nocturno se había levantado en aquellos territorios mientras que las estrellas brillaban deslumbrantes como si estuvieran felices de que el señor hades haya despertado de su largo sueño.-

La luz de la luna hacia que los cabellos de la chica brillaran con gran intensidad y belleza mientras lo poco del cabello suelto de la chica podía darse un lindo baile de bienvenida con la brisa que soplaba por ahí, su ropaje sagrado brillaba con la luz hermosa de la luna mientras que a diferencia de algunas chicas al igual que ella guerreras ella no escondía la belleza de su rostro es mas en ocasiones en batalla esta ayudaba como distracción o simple disfraz para engañar al enemigo.

“Espero y no falte mucho”

Apenas ese pensamiento llego a su mente se vio asombrada al ver lo grande que era el castillo donde el señor hades tenia su recinto de un salto subió a una de las torres donde se para en el borde de la pared mientras que quitando su ropaje sagrado sintió la brisa y el maravilloso cosmos protector de su amo el dios del inframundo.
Ahí parada con una pequeña falda que se ondeaba una blusa escotada y una pequeñas botas, estiraba sus brazos para sentir aquella brisa, parecía como si las alas de Wyvern le dieran el don de poder flotar asi se quedo mientras se sentaba ahí en el borde de la pared mirando.

-Vaya al parecer tarde en llegar ya muchos de mis compañeros han vuelto, solo espero no ser la última.-

Decía mientras que una voz parecía pedirle rogaba por poder ver la presencia de hades, sin embargo esto había crecido desde que consiguió su ropaje sagrado y mirado a su amo hades algo había crecido dentro de ella sin embargo ahora estaba para servir ahí como su espectro como juez del inframundo como el juez de la ira. Así que solo sonrió débilmente con mientras esta mostraba una pequeña malicia.

por Invitado Vie Mayo 05, 2017 7:37 pm

No era un día singular, de hecho la llegada de un juez en el ejército era el rumor que se había extendido en cada rincón del inframundo. Varios huéspedes habían sido antes los recipientes para aquellas estrellas malignas y todos habían sucumbido por el vasto poder de la maldad que encarnaba en un juez del averno. Roldan tenía una incipiente curiosidad por el nuevo juez pues para que alguien hubiera sido seleccionado por la estrella de la furia dejaba muy claro de que no era un ser ordinario.

Accedió a los pasillos del castillo con paso tranquilo y despreocupado. Miraba los blasones que pendían en las paredes sintiendo una oleada de orgullo por pertenecer a la armada de Hades. Aunque el fuera un espectro degradado, tenía aún la confianza de su señor, pues de lo contrario, el acceso al interior le hubiera sido negado desde un principio. Las escaleras que le llevaron a la cima de la torre lucían lúgubres y solitarias. Sólo unas llamas trémulas le acompañaban derramando su tenue luz sobre su cuerpo proyectando sombras alargadas de su silueta desgarbada.

Se adentró al interior de donde una chica rubia daba de manifiesto su consternación por su aparente arribo. - Si me permite interrumpir, y tal como dirían esos patéticos mortales. - Su tono zalamero flotó en el ambiente al tiempo que su figura emergía por el umbral de la entrada. - Los últimos serán los primeros... - Roldan apareció ataviado con su armadura de combate. Retiró el yelmo de su cabeza revelando sus argentadas facciones. Con solemnidad se hincó con una rodilla en el suelo.

- Y es seguro que sólo un juez de su poder será de los primeros en acudir al llamado de nuestro señor Hades. - Su mirada estaba fija en el suelo. No tenía permitido establecer contacto visual con sus superiores inmediatos a menos que ellos concedieran tal confianza entre las tropas. - Es una pena que su llegada no tenga la audiencia que dictaminan ciertos protocolos pero tendrá que conformarse con un simple espectro al servicio de las huestes infernales. - Hizo una breve pausa. - Mi nombre es Roldan y soy el espectro de Balrog quien le da la bienvenida...

por Melira Vie Mayo 05, 2017 8:27 pm

La vista desde aquella parte del castillo era esplendida solo era una de las pocas cosas que le gustaban ahora de lo que era mundo mortal había perdido las cosas que más le importaban sin embargo eso no dejaba que su mente se llenara de la furia que embargaba su alma, sin embargo al sentir que alguien se acercaba solo se dibujó una sonrisa en su rostro la verdad ella no esperaba que alguien festejara su arribo más sin embargo si esperaba que esa sería una de sus últimas apreciaciones al paisaje mundano, así que se puso de pie mientras parecía.

La voz de un chico se hiso presente en el lugar mientras que al escuchar se dio la vuelta, para ver como la luz de la luna ilumino aquel lugar dejando ver a uno de los espectros de hades el cual llevaba sobre su cuerpo el ropaje de combate, la chica se encontraba ahí con su ropa mortal así que solo miro como este se quitaba de su cabeza aquel casco dejando ver las facciones de un chico alvino, al verlo arrodillarse solo suspiro escuchando sus palabras.

-Tienes razón nunca dudare a la convocación de nuestro señor hades- Dijo mientras se acercaba a él con una mirada seria la verdad odiaba de cierta manera no mirar los ojos de nadie pues de alguna manera sentía que los ojos podían demostrar la maldad y la intenciones de las personas humanos, santos espectros, o cualquier otro sirviente de alguna deidad, así que solo dijo con cierta molestia.

-No te preocupes estrella celeste de la excelencia no esperaba una gran ovación a mi llegada pues sé que de alguna manera mi puesto nunca lo ha podido cubrir alguien pero ahora estoy aquí y agradezco tu recibimiento, pero me gustaría que la próxima vez muestres tus ojos a los míos- Dijo mientras que solo sonrió de forma más serena había recordado las palabras de Hipnos el cual pedía que fuera más paciente y amigable con sus compañeros y subordinados del ejército de hades. -Dejando de lado eso es un gusto al fin conocer alguno de los amados espectros de mi señor hades mi nombre es Melira Juez de Wyvern, pero eso ya has de saberlo-

por Invitado Vie Mayo 05, 2017 10:57 pm

Roldan asintió ante la petición de su superior. El liderazgo que emanaba de la juez no se veía empañada por la soberbia, si no caso contrario. - Se hará de acuerdo a sus requerimientos. - Con tranquilidad insuflada por su interlocutora, Roldan se levanta de su postración ante la jueza y fija sus ojos en los de ella a sabiendas que es un peligro inminente dejar que ella escrute en su alma. Los jueces como todos sabían, eran especialistas en conocer a las personas con una sola mirada. Era entonces una prueba que ejercía la soberana de Caina para un espectro regular como lo era él.

Indudablemente, Roldan no era alguien que tuviera dobles intenciones, se esperaba de él la lealtad y la obediencia ciega de parte de los que estaban por encima de su jerarquía. Tanto que había tenido el privilegio de condenar a las almas en ausencia del juez de Ptolomea. No cualquier espectro era merecedor de tal confianza y Roldan lo había logrado en un mundo donde la vileza y la traición los caracterizaba. Escuchó escueto la presentación de la dama y con un rostro pétreo esperó un poco para no dar la sensación de que estaba entusiasmado con el nuevo juez de Caina.

- Ciertamente sabía un poco de usted, pero es mejor saber de cuenta propia la identidad de nuestro nuevo juez. Los rumores como usted sabe Lady Melira son inconsistentes. - Acunó su yelmo en su brazo sin romper su postura erguida. No era fácil estar ante la presencia de un juez y levantar la más mínima señal de disgusto. Se conocían historias de algunos soldados que habían sido víctimas de los estados de animo de los jueces pues todos los espectros eran seres prescindibles que podían ser sustituidos en cualquier momento.

- Como todo espectro de rango inferior le doy mi palabra de acatar cualquier mandato que me encomiende. - Un brillo de orgullo surcó por sus ojos pues cuando empeñaba su palabra no le gustaba quedar mal. De hecho rayaba en la manía de mostrar cuán eficiente era en varios aspectos, su estrella lo orillaba a actuar de la manera más prolija que pudiera tener. - Seré un instrumento de sus directivas sin importar el costo que eso requiera,

por Melira Sáb Mayo 06, 2017 2:02 pm

La joven chica escucho las palabras de aquel joven el cual fijo la mirada en la de ella, esa acción le agradaba mas pues había escuchado en su viaje que algunos de los espectros buscaban solo subir en la jerarquía de los sirvientes de nuestro amo del inframundo, la mirada de aquel guerrero frente a ella no mostraban duda alguna y ninguna intención de maldad contra su amo, la sonrisa de la chica aun se mostraba en su cara pues por algún motivo sentía que podía confiar en este chico de una manera que tenia tiempo de no hacerlo.

Mas sin embargo algo le llama la atención el comportamiento de este era demasiado rígido escuchaba sus palabras las cuales fluían con respeto y facilidad como las aguas de los hermosos ríos estas era siempre y complejas la personalidad del chico se veía a simple vista era como lo ordenaba su estrella guardiana, Melira giro sobre sus pies observando aun aquel cautivante paisaje del manto nocturno con pequeñas luces de estrellas, los pequeños pueblos que poco a poco apagaban las luces de sus casas.

Haciendo que el cielo se viera mas iluminado agradecía que el terreno de hades no estuviera cerca de una enorme ciudad donde la contaminación la malicia humana salía de cualquier rincón de estas. -me alegro que no seas de aquellos que se dejan llevar por los rumores roldan, y muchas gracias por ofrecerte a ayudarme a servir a nuestro benévolo dios hades con tu ayuda seguro podremos vencer a esos bastardos que se atreven a poner una mano sobre las deidades, aquellos seres miserables que sirven athenea justifican venganza y odio a las deidades con justicia que tonta ilusión tienen ellos-

La mirada de Melira cambio un poco al pronunciar esas palabras pues se llenaba de rabia al pensar en la tonta idea que se llenaba la cabeza de los santos de athenea, pero respirando guardó la calma y giro de nuevo para ver a roldan - Perdonaras mi expresión pero creo que algo te tiene incomodo será acaso que me temes a diferencia tuya yo no llevo puesta mi armadura y tu parece que aun no tiene la confianza de mostrarte sin ella-

por Invitado Mar Mayo 09, 2017 1:00 pm

Roldan se quedó pensativo al ponderar las palabras de la chica. Dirigió la mirada hacia las nubes distraídamente pero recobró la atención cuando Melira volvió a mirarlo de frente. - ¿La armadura? Es cierto, pareciera que tenga razón en sus razonamientos lady Melira, sin embargo existe una justificación para portarla. - Carraspeo un poco con el puño cerrado delante de su boca. - Los soldados rasos tenemos que portarlas en las prisiones, similar a los guardias de una cárcel, los custodios deben llevar el uniforme. Es lo mismo dentro de las prisiones en el inframundo.

Notó los atuendos de Melira conocedor que los jueces podían rondar sin sus vestimentas de combate. Era el beneficio quizás del rango de juez. - Y desde que supe de su arribo en la armada del señor Hades, vine de inmediato a presentar mis saludos por lo que no tuve tiempo de ponerme algo más apropiado. - Respondió sereno sin alteración en su tono. Aunque a Roldan poca importancia le daba a la ropa normal supo que no a todos les interesaba portar la armadura en todo momento. - Sólo en ciertas ocasiones es cuando no la porto.

Una leve sonrisa asomó en sus labios recordando sus días de asueto en la ciudad. Por lo regular, muchos espectros recorrían las calles de Kauss en busca de diversión, Roldan no era la excepción. - Aún así la próxima vez trataré de no portar la armadura, siempre es bueno contar con la benevolencia de un juez. Por esa razón, abusando de su confianza, me intriga saber si le molesta llevar su armadura, aunque a decir verdad pienso que se ve mucho mejor sin ella.

por Melira Vie Mayo 12, 2017 2:44 pm

La joven chiva escuchó cada una de las palabras de aquel soldado la verdad es que si había escuchado fuera de los jueces, la señorita pandora y los dioses del inframundo, la demas variacion de soldados no podían estar por los diversos círculos del inframundo sin su ropaje sagrado. Por lo cual la escuchar las palabras de este solo una sonrisa se hiso presente en su rostro haciendo que al escuchar la duda de aquel joven y su pequeño alago solo se sentó en la orilla de la pequeña y delgada pared de aquel balcón de la torre del castillo.

-la verdad es que no me incomoda de es verdad que es un orgullo para mi portarla pero la verdad como estado en ciudades y lugares recopilando algo de información antes de llegar aquí es más fácil esconderme con mi aparecía de chica .- sus palabras mostraban algo de perspicacia pues para ella aprovechar su apariencia, era una estrategia que se podía aprovechar al máximo pero volviendo su mirada fija al chico.- aún así como ya dije gracia por venir a recibirme por lo que se en tus palabras los otros jueces no son tan benevolentes, si me habían dicho que alguno de nosotros podía ser algo exagerado en eso pero bueno-

Se dio la vuelta para mirar la pequeñas luces de la ciudad para imaginar de cierta forma como era la vida de aquellas personas humanas que vivian dentro de los territorios de su señor hades pero lo que mas le causaba curiosidad en estos momentos era como seria la prisión su cargo, había escuchado muchos relatos sobre ella pero era momento de conocerle, - Podrías guiarme a la prisión donde estaré y contarme un poco de ella-

por Invitado Jue Mayo 18, 2017 10:49 pm

La familiaridad con la que Roldan se desenvolvía ante su superior le resultaba un tanto confuso y a la vez ameno, y esto era debido al carácter condescendiente de Melira. A pesar de la gran diferencia entre sus rangos, la juez del averno no parecía hacer alarde de su estatus, si no más bien, proyectaba una aura de total confianza que no era muy habitual entre sus congéneres.

Esta cualidad era la que al parecer obraba en la representante del Wyvern pues todo apuntaba a que ella prefería regir sobre sus soldados con la confianza ganada que con la amenaza y el terror con la que usualmente un oficial se desempeñaba al cargo de sus tropas. Aún así no era bueno bajar la guardia, por lo que el esbirro de Ptolomea estaría atento en no provocar un desliz que desagradara a la nueva integrante del averno.

— Por supuesto lady Melira — Respondió circunspecto a la petición de su interlocutora. — Su zona designada le llaman Caina, es uno de los tres grandes juzgados en el reino de los muertos... — Sucinto en sus palabras, Roldan hizo una pequeña pausa para colocarse el yelmo ocultando así su rostro a excepción de sus ojos que irradiaban una parquedad inusual. — ... por lo que debemos ir al noveno círculo del infierno, ahí encontrará sus dominios.

Sus pasos resonaron por los pasillos para detenerse en el umbral de la puerta a la espera de que Melira se le uniera y emprendieran el viaje hacia el reino de los muertos.

por Melira Jue Mayo 18, 2017 11:05 pm

Melira escuchaba atentamente las palabras del joven espectro pues era cierto no con todos tenia la misma amabilidad de hecho si se ponía pensar era extraño, como era que la amabilidad había hecho presente ante aquel chico, cierto era su mirada esta mostraba fidelidad a hades, por lo cual había decidido confiar con el pero no se descuidaría, la verdad era que no todas las almas del gran ejercito de su señor eran asi de fieles no al menos con sus superiores, por lo cual al escuchar los pasos del chico alejándose en dirección a la puerta la joven solo cerro sus ojos y de su pequeño colar salió lo que era su cloth.

Aquel cloth en forma del Dragon de Wyvern se desensamblo y parte por parte comenzó a unirse al cuerpo de su portadora asi dejando su casco en sus manos mientras que con una sonrisa se giró con cierta arrogancia y frialdad aquel pueblo y colocándose con delicadeza y elegancia su yelmo miro al chico frente a ella. -Entonces tomemos camino será un buen paseo – Dijo mientras que camino y se coloco a lado de la estrella de la Excelencia mientras que espero que esta la guiara por el camino indicado. Mientras que el viento de la superficie le daba un pequeño soplido a los hermosos cabellos dorados de la chica que sobresalían por la espalda de ropaje haciendo que se elevara un poco.

-Dime Roldan, has conocido alguno de mis dos compañeros?-

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